lunes, 19 de mayo de 2014

El valor de la ignorancia

Serie: Con Espíritu Constructivo

Una vez que empiezas a dudar(que para mi es una parte fundamental de mi alma, dudar y preguntarte cosas)  "¿Cómo sabes que algo es verdad?...cuando existen tantas teorías ...

¡ Puedo vivir con la duda y con la incertidumbre y no sabiendo !

Pienso que es más interesante vivir no sabiendo que tener respuestas que son equivocadas.
                                                  

    "El placer de descubrir las cosas".  R. Feynman ( premio Nobel de física 1965 )

                                                          

  Una frase popular dice que la ignorancia es atrevida. Esta frase suele ser la opinión del que se cree listo, el que cree que sabe, ante la “osadía" al actuar o manifestarse del que él considera ignorante. Lo que normalmente pasa desapercibido para el que opina es que, en general, el que actúa de forma atrevida es porque cree que sabe pues no es consciente de su ignorancia.

  Ahora bien, si lo pensamos en profundidad, nos daremos cuenta de que la ignorancia es la antesala del conocimiento. Ignoramos lo que no sabemos y esto, que parece una obviedad, no recibe muchas veces el reconocimiento apropiado. Sólo podemos aprender lo que desconocemos y por tanto, reconocer nuestra ignorancia, tiene un valor fundamental en el proceso de aprendizaje.

  Cuando nacemos no sabemos nada en cuanto al contenido del mundo se refiere y podríamos decir que en términos de conocimiento somos 100% ignorantes. A partir de ahí, una exploración tremendamente activa del mundo, por el puro placer de explorar, nos proporciona un conocimiento del mismo que nos permite saber cómo funciona y cómo hacerlo funcionar. De esta manera podremos hacer lo oportuno para cubrir nuestras necesidades en la vida, algo que, según el caso, puede verse afectado dependiendo de lo certero de ese conocimiento del mundo.

  Estamos aprendiendo, construyendo sabiduría y me gustaría resaltar que en una edad temprana nuestra experiencia constituye una fuente principal, casi la única, de aprendizaje. Posteriormente ésta es sustituida, en mayor o menor medida, por otras como teorías, profesores, padres, mentores, libros etc... y esto para nada supone un avance, si no todo lo contrario. En mi opinión, la mejor manera de actualizar nuestra comprensión de las cosas en un mundo cambiante es no dejando de lado la experiencia como fuente de aprendizaje.

  Pero el universo es infinito y por tanto también lo es potencialmente la fuente de conocimiento. Por otro lado, la vida es limitada en el tiempo y lamentablemente demasiado corta para aprender todo lo que se podría. Por muy larga y fructífera que sea la vida de cualquier persona, en términos de conocimiento, aquello que ignora será con diferencia mucho más que lo que sabe. 
 Si trasladamos esto a nivel de identidad significa que proporcionalmente somos mucho más ignorantes que sabios.
  
  
La persona verdaderamente sabia es la que siendo consciente de lo que aún no sabe deja de lado su seguridad y comodidad para adentrarse en ese terreno de lo desconocido. Por tanto un buen punto de partida para aprender, es conocer y apreciar lo que ignoras y tener el atrevimiento de avanzar para seguir construyendo conocimiento.

 El ignorante, por el contrario, es el que no es consciente de su propia falta de conocimiento en cualquier área. El estado más avanzado de ignorancia es el de  aquel que cree que todo lo sabe, porque con esta actitud ha cerrado las puertas al aprendizaje.  



La sociedad, nuestra cultura, penaliza en exceso el hecho de no saber. Esto puede arrastrarnos a construir teorías rápidas acerca del funcionamiento de las cosas en lugar de permanecer abiertos el tiempo suficiente  para construir un conocimiento más certero aunque a veces temporal sobre el asunto.
 Esta actitud es  más evidente cuanto más alto es el cargo y la responsabilidad de la persona, pues en estos casos se penaliza aún mas la falta de respuestas.
 Hagas lo que hagas en la vida siempre estás tratando de conseguir algo. Seas obrer@, am@ de casa o directiv@ estarás  haciendo cosas basándote en un conocimiento y cuanto más certero sea éste, la probabilidad de conseguir lo que quieres en la vida será mayor.
  Como Feynman, pienso que es más interesante vivir no sabiendo siempre que haya cabida para la duda y la posibilidad de seguir investigando, que tener respuestas que son equivocadas.

Autor: Maxi García.