Una vez que empiezas a
dudar(que para mi es una parte fundamental de mi alma, dudar y preguntarte
cosas) "¿Cómo sabes que algo es verdad?...cuando existen tantas
teorías ...
¡ Puedo vivir con la duda y
con la incertidumbre y no sabiendo !
Pienso que es más
interesante vivir no sabiendo que tener respuestas que son equivocadas.
"El
placer de descubrir las cosas". R. Feynman (
premio Nobel de física 1965 )
Una frase popular dice que la ignorancia es
atrevida. Esta frase suele ser la opinión del que se cree listo, el que cree
que sabe, ante la “osadía" al actuar o manifestarse del que él considera
ignorante. Lo que normalmente pasa desapercibido para el que opina es que, en
general, el que actúa de forma atrevida es porque cree que sabe pues no es
consciente de su ignorancia.
Ahora bien, si lo pensamos en profundidad,
nos daremos cuenta de que la ignorancia es la antesala del conocimiento. Ignoramos
lo que no sabemos y esto, que parece una obviedad, no recibe muchas veces el
reconocimiento apropiado. Sólo podemos aprender lo que desconocemos y por
tanto, reconocer nuestra ignorancia, tiene un valor fundamental en el proceso
de aprendizaje.
Cuando nacemos no sabemos nada en cuanto al
contenido del mundo se refiere y podríamos decir que en términos de
conocimiento somos 100% ignorantes. A partir de ahí, una exploración
tremendamente activa del mundo, por el puro placer de explorar, nos proporciona
un conocimiento del mismo que nos permite saber cómo funciona y cómo hacerlo
funcionar. De esta manera podremos hacer lo oportuno para cubrir nuestras
necesidades en la vida, algo que, según el caso, puede verse afectado
dependiendo de lo certero de ese conocimiento del mundo.
Estamos aprendiendo, construyendo sabiduría y
me gustaría resaltar que en una edad temprana nuestra experiencia constituye
una fuente principal, casi la única, de aprendizaje. Posteriormente ésta es
sustituida, en mayor o menor medida, por otras como teorías, profesores,
padres, mentores, libros etc... y esto para nada supone un avance, si no todo
lo contrario. En mi opinión, la mejor manera de actualizar nuestra comprensión
de las cosas en un mundo cambiante es no dejando de lado la experiencia como fuente
de aprendizaje.
Pero el universo es infinito y por tanto
también lo es potencialmente la fuente de conocimiento. Por otro lado, la vida
es limitada en el tiempo y lamentablemente demasiado corta para aprender todo
lo que se podría. Por muy larga y
fructífera que sea la vida de cualquier persona, en términos de conocimiento,
aquello que ignora será con diferencia mucho más que lo que sabe.
Si
trasladamos esto a nivel de identidad significa que proporcionalmente somos
mucho más ignorantes que sabios.
La persona verdaderamente sabia es la que
siendo consciente de lo que aún no sabe deja de lado su seguridad y comodidad para
adentrarse en ese terreno de lo desconocido. Por tanto un buen punto de
partida para aprender, es conocer y apreciar lo que ignoras y tener el
atrevimiento de avanzar para seguir construyendo conocimiento.
El ignorante, por el
contrario, es el que no es consciente de su propia falta de conocimiento en
cualquier área. El estado más avanzado de ignorancia es el de aquel que cree que todo lo sabe, porque con
esta actitud ha cerrado las puertas al aprendizaje.
La sociedad, nuestra cultura, penaliza en
exceso el hecho de no saber. Esto puede arrastrarnos a construir teorías
rápidas acerca del funcionamiento de las cosas en lugar de permanecer abiertos
el tiempo suficiente para construir un
conocimiento más certero aunque a veces temporal sobre el asunto.
Esta actitud es más evidente cuanto más alto es el cargo y la
responsabilidad de la persona, pues en estos casos se penaliza aún mas la falta
de respuestas.
Hagas
lo que hagas en la vida siempre estás tratando de conseguir algo. Seas obrer@,
am@ de casa o directiv@ estarás haciendo
cosas basándote en un conocimiento y cuanto más certero sea éste, la probabilidad
de conseguir lo que quieres en la vida será mayor.
Como Feynman, pienso que es más interesante
vivir no sabiendo siempre que haya cabida para la duda y la posibilidad de
seguir investigando, que tener respuestas que son equivocadas.
Autor: Maxi García.