lunes, 2 de marzo de 2015

Incertidumbre e Innovación



Serie: Aprendizaje.
Parece ser que a los seres humanos nos molesta la incertidumbre. Necesitamos dar un sentido a todas nuestras experiencias.
Y rápido.
En situaciones o experiencias nuevas parece que tenemos mucha más urgencia en dar un sentido, cualquiera, que acertar dándoselo. Por ejemplo,  antes de convertirlos en un fenómeno meteorológico, esa apremiante necesidad interpretó los rayos como un recurso de algunos dioses. 

Esta incomodidad con la incertidumbre parece impulsarnos a creer que vivimos en un mundo estable compuesto por acontecimientos predecibles.
Reducir la sensación de incertidumbre no solo es deseable sino parece ser una condición para sobrevivir. Sin embargo, eliminarla es imposible pues es inherente a la existencia: vivir implica morir. ¿Cabe más incertidumbre saber que un día moriremos pero no saber cuándo ni cómo sucederá? Aceptemos de cualquier modo que esto es incómodo y a la vez certero.
En mi caso, que me encanta viajar a lugares culturalmente muy distintos al mío, la víspera del viaje mezclo las ganas por dejar “el mundo conocido” con un incómodo desasosiego. Atribuyo éste a una construcción fantasiosa de mi parte emocional que imagina, sin mi permiso, lo que será abandonar mi estado normal de acontecimientos predecibles y controlados por otro distinto donde desconozco lo que pueda ocurrir. Claro está, como ya he dicho, que la situación inicial no es tan segura como tiendo a imaginar ni la nueva tan imprevisible como exagera mi inconsciente. Si me dejase llevar por la urgencia de acabar con el desasosiego me perdería todo el enriquecimiento personal que obtengo en cada viaje.  

Voy a intentar llevar estas ideas a un terreno algo más abstracto partiendo de una proposición:

Una idea nueva nace a partir de un espacio mental individual de incertidumbre.

Es porque dudamos de la validez de una idea o grupo de ellas que generamos otra que la sustituya. Existe un momento, entre el nacimiento de la nueva y la invalidez de la antigua, en el que “no sabemos”. Es un espacio de incertidumbre.  
 La incertidumbre es pues un requisito para mejorar algo. Si una organización transmite a quienes trabajan en ella, que espera que traten de mejorar cómo se hacen las cosas, esto supondrá que cada uno deberá abrir espacios de incertidumbre que permitan la emergencia de nuevas ideas que alimenten formas alternativas, y mejoradas, de hacer las cosas.

Todo lo anterior es lo racionalmente deseable. Sin embargo, lo que nos suele ocurrir es que enfrentados a una sensación de desasosiego nuestra prioridad absoluta es tratar de reducirla. Y lo hacemos sin saber que lo estamos haciendo de forma rápida e inconscientemente. 

Para que surjan nuevas ideas que generen innovación debemos primero ser conscientes de nuestra incomodidad en la incertidumbre y luego gobernarla –la incomodidad-. Necesitamos sentir y aceptar como normal la incomodidad de “no saber” para desactivar ese mecanismo automático de dar una “respuesta” priorizando la rapidez sobre su calidad.
A nuestro entender,  muchas organizaciones sinceramente interesadas en que sus trabajadores mejoren, innovando su entorno y actividad, deberían considerar todo lo dicho para potenciar en las personas el desarrollo de su habilidad para  generar y manejar espacios de incertidumbre controlada.   

Autor: Javier Fidalgo Fernández


3 comentarios:

  1. Con lo cómodo que resulta adaptarse a la corriente, el buscar otros caminos para responder a preguntas o necesidades es difícil. No solo hay que trabajar en buscar la idea, sino que también hay que resistir la presión del entorno, que pone toda clase de trabas a las nuevas ideas.
    Afortunadamente, hay personas que no ceden a la presión. Tienen una idea y trabajan en desarrollarla y en comunicarla. Eso es lo que hace avanzar a la humanidad.

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  2. No puedo esta más de acuerdo con el tema de este post.
    Al igual que me pasa con la lectura, agradable, de vuestros post, esa "incomodidad" cómoda de no leer lo políticamente correcto y tener que dar vueltas al significado concreto del artículo. Hasta que conviertes en normal esa cierta incomodidad que hace que veas otro punto de vista distinto y complementario.

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    1. Hola Miguel Ángel. Gracias por tu interés. Cambiamos la web y en ella incorporamos el blog. Te adjunto link al blog y otro más a un enlace a un estudio que hicimos sobre Desarrollo Directivo.
      Recibe un cordial saludo.
      http://www.areadeliderazgo.com/desarrollo-directivo-espana-2015-3/
      http://www.areadeliderazgo.com/blog-2/

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